Inmerso en un mundo lleno de intrigas y desconfianzas, creemos que no necesitamos ayuda de alguien para afrontar los problemas de frente.La realidad es que por lo menos necesitamos de un verdadero amigo, que nos brinde su hombro para cuando creamos que ya no podemos mas con nuestros problemas y que vamos cayendo en picada...
En esos momentos es cuando aparece una mano amiga, que con sabias palabras sabe reconfortarte el alma... te sostiene en sus brazos para que la caída no sea tan brusca, y siempre esta a tu lado, sin que lo puedas ver, pero que si lo puedes sentir...ese amigo nunca te falla, aunque a veces así lo creas.Solo cierra tus ojos y pídele un consejo y el sabrá responderte de la mejor manera; el se las sabe todas mas una... Solo aprende a escucharlo...
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